Véase el significado etimológico de la palabra política y después compárese este significado con lo que algunos imbéciles han llegado a hacer de un arte.
Política (con mayúsculas) es Estado, es interés común, bienestar… pero a pesar de ello algunos han visto en el interés de todos su propio interés. Como la rémora que clava sus mandíbulas para alimentarse y entorpecer el avance.
Algunos han sido capaces de hacernos creer que el arte de dirigir y liderar a los ciudadanos hacia metas y objetivos cada vez mas altos se basa en la confrontación permanente, en la discusión ideológica, en la critica destructiva, en la batalla personal.
Nos han hecho creer que el político es un tipo duro, áspero, sin escrúpulos, forjado en mil batallas de las que ha salido victorioso a pesar de los daños colaterales.
Pues para esos tengo yo otros calificativos, y no son buenos, nuestra lengua es especialmente rica en ellos. Cada uno tendrá los suyos.
He conocido gente buena, buenos profesionales, buenas personas, gente humilde, sencilla, cercana, amable. Y he huido siempre de los que no me aportaban nada ni tenía yo nada que aportarles, de los que no me necesitaban porque eran mucho mejores que yo, de los que cuando los he necesitado se han diluido como un azucarillo en agua caliente.
Hay personas que no suman, otras que restan, pero últimamente entre la clase política abundan las que dividen, nunca mejor dicho.
Necesitamos políticos que multipliquen, los panes y los peces, que con un punto de apoyo muevan el mundo, como dijo Arquímedes. Y por mas que les damos nuestro apoyo no hacen uso de la palanca. No saben, pensaba hace un tiempo, no quieren, llegue a la conclusión después. Ahora ya no se que pensar, qué es peor un idiota o un malvado.?
Al idiota se le puede reconducir, hacer de él una persona de bien, al malvado es mejor aislarlo en su mundo, encapsularlo, para que sus fechorías tengan el menor efecto posible sobre los demás.
Estamos viviendo una etapa de malvados en política, de egos personales, de ganar a base de debilitar al contrario, no de ser mejor que él. Hasta ahora el político era rémora del sistema, se dejaba llevar por el sistema a cambio de ello, y a pesar de ellos el sistema avanzaba. Ahora ya no se trata de eso, hay que ir mas allá, acabar con el sistema, socavar sus apoyos, los egos bien alimentados son cada vez mas grandes y cada vez piden mas sacrificios.
Creo que ha llegado el momento de despolitizar todo esto, de resetear el sistema y empezar de cero, nos hemos equivocado dando nuestro apoyo a tanto idiota y hemos dado pie a que aparezcan los malvados, los señores oscuros de las películas de ficción se han hecho realidad y salvo que contemos con algún arma secreta o surja algún personaje del tipo “Superman” o “Batman”, lo vamos a padecer mas allá de la pantalla de televisión.
Rafael Valls
17-2-21
Políticamente Incorrecto 
Felicidades Rafa, por este post tan sencillo y contundente con el que estoy de acuerdo. Añadiría y no sé la razón, que los peores «hacedores de política» (los que restan y generan división, que no disensión) son los que más brillan mediáticamente, porque en política hay también gente buena, pero no brillan porque no alimentan la discordia y por eso no salen en los medios … y terminan yéndose de la política y cada vez nos quedamos con los peores.
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